La manicura permanente y la semipermanente han adquirido mucha popularidad en los últimos años y son una de las técnicas más demandadas en los centros de estética.
Es comprensible si se tiene en cuenta que ambas permiten una manicura rápida (de 15 a 30 minutos), económica, de aplicación sencilla, con un excelente resultado estético y de larga duración.
De hecho, la principal diferencia entre la manicura permanente y la semipermanente es que en la primera el esmalte se puede mantener intacto incluso hasta 30 días y, en la segunda, de 15 a 20 días aproximadamente.
No obstante, en ambos casos se puede hablar de larga duración. Sobre todo, si se comparan con los esmaltes de uñas convencionales, que suelen cuartearse y perder su brillo a los pocos días.
El problema está en que estos tipos de manicura pueden favorecer la aparición de uñas quebradizas y débiles, así como el desarrollo de una dermatitis alérgica de contacto.
Tener las uñas dañadas por el esmalte permanente o semipermanente suele deberse a dos factores. En primer lugar, por el paso a paso que debe seguirse en ambas técnicas y, en segundo, por el proceso que hay que llevar a cabo para quitar el pintauñas.
Tanto en la manicura permanente como semipermanente primero se tiene que eliminar cualquier esmalte previo, frotar la uña con un cepillo, usar una lima para alisar la superficie y emplear un tipo de alcohol (alcohol isopropílico) para eliminar la humedad.
La manicura continúa con la aplicación de tres o más capas consecutivas de esmalte, la utilización de una fuente de luz para endurecerlo y secarlo y una nueva limpieza con alcohol.
Todo este proceso – los microtraumatismos causados por el cepillo y la lima, la sequedad excesiva causada por el alcohol y la acetona y el contacto con el propio esmalte – es lo que puede acabar provocando la fragilidad de las uñas y una alteración en su coloración.
Además, para poder quitar la manicura permanente es necesario sumergir los dedos en un disolvente, generalmente acetona, durante al menos 15 o 20 minutos o bien envolverlos con algodones empapados que suelen cubrirse con papel de aluminio.
En el caso de los esmaltes permanentes, además, puede ser necesario el uso de un torno, por lo que este proceso debe realizarse en el centro de estética.
Las uñas quebradizas y las dermatitis alérgica por contacto son los principales riesgos de las manicuras permanentes y semipermanentes.
Por lo que respecta a la dermatitis de contacto de tipo alérgico, esta suele aparecer como consecuencia de una sensibilización a dos componentes llamados acrilatos y metacrilatos que se forman cuando los esmaltes entran en contacto con una fuente de luz ultravioleta.
Este tipo de dermatitis alérgica por contacto solía afectar sobre todo a Principalmente, por la poca concienciación sobre los riesgos de los acrilatos y metacrilatos y la falta de medidas de protección.
Sin embargo, su popularización y la comercialización de kits de manicura permanente para uso en casa ha hecho que esta dermatitis también sea habitual en usuarias de estas técnicas.
En el caso de las esteticistas profesionales, la alergia a los acrilatos suele manifestarse con los siguientes síntomas.
En la fase aguda, aparecen lesiones exudativas y que causan picor, sobre todo en los pulpejos de los dedos de las manos. Posteriormente, estas suelen provocar una descamación de la piel y la formación de fisuras (pulpitis seca), el engrosamiento de la uña (hiperqueratosis subungueal) y dolor.
También es frecuente observar un desprendimiento de la uña (onicólisis), líneas de sangrado debajo de las uñas (hemorragias en astilla) y hormigueo y disminución de la sensibilidad en los dedos.
Aunque las lesiones de esta dermatitis alérgica suelen localizarse sobre todo en las manos, estas pueden aparecer también en el rostro, el cuello y los antebrazos, a través del contacto con los dedos u objetos contaminados como el teléfono móvil o la mesa de trabajo.
En cuanto a las clientas de los centros de estética, las lesiones suelen aparecer principalmente en la zona periungueal y los pulpejos. Sin embargo, en las usuarias de sets de manicura permanente, el daño suele ser más grave y extenso, afectando no solo a las manos, sino a otras partes del cuerpo.
Es fundamental que tanto esteticistas profesionales como usuarias de manicuras permanentes y semipermanentes sean conscientes de los posibles riesgos de ambas técnicas.
A partir de ahí, es imprescindible llevar a cabo una serie de medidas preventivas, si se quiere seguir utilizando este tipo de esmaltes.
Tampoco se recomienda recurrir a ellas con frecuencia, pues tanto los esmaltes como la técnica pueden resultar demasiado agresivos y causar fragilidad en las uñas. Por lo general, no deberían mantenerse más de 3 a 5 meses y se deberían hacer periodos de descanso de al menos un mes.
Asimismo, es fundamental acudir a un centro de estética profesional que garantice las medidas de seguridad necesarias para minimizar el riesgo a una sensibilización a los acrilatos.
En ningún caso se aconsejan los kits de manicura permanente en casa.
Si a pesar de todas estas medidas preventivas se sospecha de una reacción alérgica, hay que acudir al dermatólogo para que pueda valorar las lesiones y confirmar el diagnóstico con pruebas epicutáneas.
El tratamiento en el caso de dermatitis de contacto por acrilato suele consistir en corticoesteroides tópicos u orales, según la gravedad del cuadro.
En caso de tener las uñas estropeadas por el esmalte permanente, estas pueden fortalecerse y recuperar su aspecto saludable mediante una serie de cuidados específicos.
En caso de que estas medidas para uñas dañadas por esmalte permanente resulten ineficaces, hay que acudir al dermatólogo.
Autor: Laboratorios Viñas, departamento científico.
Gatica-Ortega, M.E. Pastor-Nieto M.A. et alt. Dermatitis alérgica de contacto por acrilatos en esmaltes permanentes [en línea]. ACTAS Dermo-Sifiliográficas, 2017. <https://www.actasdermo.org/es-dermatitis-alergica-contacto-por-acrilatos-articulo-S000173101730515X>
Moreno, L. El peligro de los esmaltes de uñas semipermanentes [en línea]. Cruz Roja Española. Hospital de Córdoba. < https://hospitalcruzrojacordoba.es/alergologia-cordoba/el-peligro-de-los-esmaltes-de-unas-semipermanentes-eccema-dermatitis-de-contacto-por-acrilato/>
Recibirás la newsletter Consejos de CUIDADOEXPERTO trimestalmente en tu email.
Estás a un sólo paso de completar tu subscripción
Para finalizar el proceso, haz clic en el enlace que te acabamos de enviar a tu correo electrónico para validar tu cuenta.
Si no lo tuvieras en tu bandeja de entrada, comprueba tu bandeja de SPAM o de correo no deseado.
Ha ocurrido un error, por favor inténtelo de nuevo más tarde.
La fragilidad ungueal suele manifestarse con uñas partidas o abiertas en capas. Esta alteración provoca sobre todo una preocupación estética, pero es importante poder determinar por qué se rompen las uñas y actuar sobre las posibles causas.
LEER MÁSEl estrés puede provocar una pérdida exagerada y repentina de cabello. Esto suele causar mucha preocupación, a pesar de que no suele ser una alopecia muy evidente. Comprender por qué sucede es la mejor manera para tratar de evitarla.
LEER MÁSUnos bajos niveles de hierro pueden provocar la caída del cabello. Este tipo de alopecia es frecuente en las mujeres en etapa fértil y suele causar un importante malestar estético. Lo importante es que, al corregir la deficiencia de hierro, la pérdida de pelo se resuelve por sí misma.
LEER MÁSEl picor en el cuero cabelludo puede deberse a diferentes causas, pero siempre provoca una incomodidad que debe tratarse. De lo contrario, tiende a empeorar, pudiendo afectar de forma muy significativa la calidad de vida de quienes lo sufren.
LEER MÁSRecibirás la newsletter
Consejos de CUIDADOEXPERTO
trimestralmente en tu email.
Estás a un sólo paso de completar tu subscripción
Para finalizar el proceso, haz clic en el enlace que te acabamos de enviar a tu correo electrónico para validar tu cuenta.
Si no lo tuvieras en tu bandeja de entrada, comprueba tu bandeja de SPAM o de correo no deseado.
Ha ocurrido un error, por favor inténtelo de nuevo más tarde.